Cecilie relata el momento clave en el que cae en el engaño: su novio con quien venían teniendo una relación de ensueño logró sacarle 200 mil dólares engañándola con una fotografía y diciéndole que estaba en peligro.
Así, ella puso a su disposición su dinero, su tarjeta de crédito y hasta incluso pidió un préstamo en el banco con el propósito de ayudarlo. Algo similar vivieron Pernilla Sjöholm y Ayleen Charlotte, con quien Cecilie se contactó e incluso forjó una relación de amistad.
Si bien la justicia no amparó a Fjellhøy en su caso, ser parte del documental de Netflix fue una forma de obtener venganza y hacer justicia. Actualmente, es diseñadora de UX y servicios en Sopra Steria, una empresa de software parisina y su historia de vida también la llevó a ocuparse de las víctimas de estafas. También fundó la organización sin fines de lucro action:reaction, con la que busca "crear un cambio en la legislación y ayudar a las víctimas a obtener la ayuda adecuada, tanto mental como jurídicamente".
Pero, tal vez lo más curioso es que, luego de su nefasta experiencia con la famosa red social de citas, Cecilie Fjellhøy aún sigue usando Tinder. Ella misma ha confesado que para ser parte del film de Netflix puso "su corazón y su alma" y ha decidido dejar atrás esta experiencia y mirar hacia adelante.
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