El caco, identificado hasta ahora solo con su alias “El Bombo”, andaba junto a varios de sus secuaces cuando fue localizado, muriendo en la refriega. Otros dos resultaron heridos.
El jefe de la Policía Nacional, mayor general Eduardo Then, explicó que desde hace días se tenían las pistas del cabecilla, pero que este se movía entre los sectores de la margen del río Ozama, eludiendo la persecución hasta ahora.
“Desde hace tiempo que esa banda tiene en zozobra los a barrios Capotillo, la Surza, Gualey, Guachupita y La Ciénega cometiendo asaltos, sicariato, robos de motores y frecuentes tiroteos”, explicó.
La banda de “El Bombo” ha ganado notoriedad en los últimos años porque algunos de sus asaltos se hicieron virales en las redes sociales, en los que mostraban sus niveles de violencia y el uso intensivos de tiroteos para repeler la persecución policial o intimidar a sus víctimas.
La banda también ha mantenido bajo terror a los motoconchistas, los cuales han denunciado que le tienen que pagar una cuota de 1,500 pesos semanales para “protección”.
Los que no lo pagan tienen que enfrentar los asaltos y robos de la misma banda, por lo que terminan sucumbiendo. Igual atestiguan comerciantes de las zonas, especialmente en Gualey, quienes señalan que a los que se resisten corren el riesgo de ser baleados y hasta perder la vida.
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