Durante su visita a una antigua central eléctrica de carbón de Iberdrola que se reconvertirá en un parque eólico marino, el jefe del Estado ofreció un discurso en el que afirmó que el cambio climático es "un peligro claro e inmediato" y también alertó de que "la salud de nuestros ciudadanos y nuestras comunidades está literalmente en juego".
"Es por eso que yo y tantas otras personas con las que crecí tenemos cáncer y por qué durante mucho tiempo Delaware tuvo la tasa de cáncer más alta de la nación", expresó Biden cuando hablaba de las refinerías petroleras. "Pero eso quedó en el pasado", añadió
Ante el estupor generalizado de las declaraciones, la Casa Blanca ha tenido que salir nuevamente al paso y ha aclarado que el presidente Biden se encuentra completamente sano a sus 79 años. Y añaden que, aunque en su día padeció melanomas, ya está recuperado y en su informe médico más reciente (noviembre de 2021) figura que se trata de "un hombre sano y vigoroso, que está en condiciones de desempeñar con éxito las funciones de la Presidencia".
Precisamente horas más tarde salía un nuevo comunicado de la Casa Blanca para anunciar que Biden ha dado positivo por COVID-19 y tiene síntomas "muy leves" de la enfermedad, según la portavoz Karine Jean-Pierre.
Biden, que tiene puesta la vacuna contra la enfermedad y también los dos refuerzos, ha comenzado un tratamiento con el antirretrovírico oral Paxlovid, permanecerá aislado en la Casa Blanca y seguirá trabajando aislado hasta que dé negativo.
En este sentido, Jean-Pierre explicó que el mandatario ha estado ya en contacto con miembros de su equipo por teléfono y participará en varias reuniones telefónicas o por videoconferencia desde su residencia.
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