El Domingo de Resurrección es un día donde se produce un «caos» en las carreteras debido a que miles de personas que se movilizaron al interior del país por la Semana Santa, deciden regresar a sus hogares.
Verifica el estado del vehículo. Antes de salir, revisa el correcto funcionamiento de las luces altas, bajas, direccionales así como de las intermitentes o las luces de emergencia y las condiciones de la llanta de refacción.
Equipaje seguro. Si tu carro tiene canastilla de viaje, asegúrate antes de arrancar de que esté bien cerrado y perfectamente asegurado, así evitarás un accidente.
Asegúrate de llevar un bolso con cables de arranque, agua, comida.
Consulta las rutas para evitar contratiempos que retrasen y dificulten el regreso a casa. Es importante que revises si la ruta no presenta contratiempos como cierres, derrumbes o problemas de orden público y consulta los recursos que tienes en carretera en caso de una emergencia (hospitales, hoteles, estaciones de servicio, etc.).
En caso de que uses sólo la cajuela, toma la precaución de la que la carga esté distribuida de forma correcta y equitativamente.
Llena el tanque. Puede que no siempre sepas dónde está la próxima estación de servicio. Sé cauteloso y no dejes que el tanque esté por debajo de un tercio de su capacidad.
Si viajas con niños pequeños de manos curiosas, asegúrate de activar todos los seguros para niños en tu vehículo.
Mucho cuidado con los adelantamientos que realizas en la vía. Hacerlos de forma imprudente puede ser bastante peligroso para ti, para los otros ocupantes del vehículo y demás agentes de la vía.
Enciende las luces y baja la velocidad mientras llueva.
Conserva la distancia de frenado con los vehículos que te anteceden, pues puedes ocasionar un accidente si no frenas a tiempo.
Observa el entorno y presta atención al camino. Uno de los puntos principales para una conducción segura es siempre estar atento, conocer los señalamientos de tránsito, mantener la visión en la carretera y observar los alrededores.
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