Hay parejas se animan a disfrutar de esta postura para así mantener la sensación de intimidad por más tiempo. Descubre por qué.
La postura de la cucharita es aquella que permite un acercamiento en la pareja que resulta tanto tierno como apasionado. Por ello, si bien se considera como una posición romántica, también es excitante.
Se le denomina “cucharita”, ya que la forma que adoptan los compañeros es similar a cuando se colocan dos cucharas una al lado de la otra. En inglés, la práctica de esta se denomina spooning.
Aunque es posible que tengas otras posiciones preferidas, en algún momento habrás disfrutado de la cucharita. Incluso, hay quienes la consideran como una de las mejores posturas; dado que no es necesario esforzarse demasiado en el plano físico. Y se concede tiempo completo a dejarse llevar por la pasión.
¿Cómo se hace la postura de la cucharita?
Ambos miembros de la pareja se acuestan de lado sobre la superficie de su preferencia: la cama, la alfombra, el mueble del salón, etcétera. Para realizarla, según explica un artículo publicado en 2018 por Reproductive System and Sexual Disorders , uno de los dos debe quedar dándole la espalda a su compañero. Luego, el otro será quien tome a su compañero por las caderas, mientras lo penetra.
La cucharita es una postura que resulta sencilla y cómoda para ambos. Además, tiene como beneficio adicional el hecho de que deja cierta libertad para masturbar a la pareja al mismo tiempo que se le penetra. Por ende, es una posición que puede conducir con facilidad al orgasmo.
Cabe destacar que la penetración no tiene por qué hacerse solo a través de la vagina; también es posible realizarla a través del ano. Por lo que, a veces, en lugar de recurrir a la postura del perrito (por ejemplo), la pareja prefiere disfrutar con la práctica del spooning.
¿Por qué es una de las mejores posiciones sexuales?
La postura de la cucharita es una de las más comunes en la práctica sexual debido a los múltiples beneficios que ofrece. A continuación, te los detallamos uno por uno.
- Libertad para las caricias y la masturbación. Como ya te hemos señalado antes, la postura de la cucharita da libertad para acariciar y masturbar a la pareja mientras se penetra. Así, la estimulación de las distintas zonas erógenas (que provocan placer) del otro hará que ambos disfruten del momento. Además, este hecho ayuda a afianzar la relación de las parejas.
- Penetración vaginal o anal. En esta posición existe la posibilidad de llevar a cabo tanto la penetración anal como vaginal.
- Control para ambos. Si bien es cierto que uno de los dos miembros de la pareja puede guiar el ritmo y la intensidad de la penetración, esta posición también permite que ambos cooperen (estimulándose así el uno al otro).
- Sexo de más duración. Con la postura de la cucharita, el sexo puede durar por más tiempo; ya que el hombre tarda un poco más en llegar al clímax.
- Menor esfuerzo físico. Como ya te hemos mencionado, en esta posición ambos están tendidos de lado sobre una superficie y no es necesario que realicen demasiado esfuerzo físico. Al contrario, los movimientos se realizan con comodidad. Y, de hecho, este es uno de los motivos por los que es también la postura más elegida entre las gestantes del tercer trimestre de embarazo; tal y como indica un estudio desarrollado en la Universidad de Wiener (Perú).
- Contacto visual. El compañero que queda delante es capaz de elegir entre permanecer de espaldas a su pareja o girarse un poco para establecer contacto visual y así excitarse más.
- Mayor sensación en la penetración. La postura de la cucharita favorece a que tanto la vagina como el recto se hagan un poco más estrechos que lo usual. En este sentido ambos miembros de la pareja aumentarán las sensaciones durante la penetración, lo que permite alcanzar orgasmos más placenteros.
- Más placer y sensación. Muchas personas exponen que las relaciones sexuales son más placenteras cuando se practica la postura de la cucharita. Esto puede deberse a que existe un mayor contacto piel con piel, así como una mayor capacidad de estimular el punto G o el punto P en el caso de los hombres.
- Favorece la liberación de hormonas. Se cree que esta posición sexual ayuda a la liberación de múltiples hormonas, sobre todo de oxitocina, la cual está muy relacionada con la excitación sexual y las erecciones en los hombres.
- Permite disimular con mayor facilidad. Tener relaciones sexuales cuando se tienen niños en casa puede ser un verdadero problema. Afortunadamente, la cucharita es una posición sexual que permite disimular con rapidez en caso de ser sorprendidos por los pequeños.
Por desgracia, no todo pueden ser ventajas. Esta posición sexual puede llegar a ser incómoda para muchas personas, sobre todo si la mantienen durante un tiempo prolongado. Después de algunos minutos, es posible notar un entumecimiento o un hormigueo en alguna parte del cuerpo. No obstante, los beneficios superan con creces a las desventajas.
La postura de la cucharita: la ternura y el romance
La postura de la cucharita es una excelente oportunidad para disfrutar del sexo en pareja con una dosis de ternura. Uno de los compañeros es capaz de abrazar al otro durante la penetración y, así, transmitir cierta sensación de “protección”, afecto y, en pocas palabras, cercanía.
Dicho de otra forma: el spooning puede ir de la mano con el cuddling (abrazarse) y convertirse, como bien explica la terapeuta Sarah Hunter Murray en una experiencia romántica para ambos.
Ahora bien, es importante aclarar que no hace falta ser un romántico para disfrutar de ella. Cada miembro la disfrutará en el momento que ambos deseen, tanto de una forma tierna como de una forma pasional.
El placer estará presente y lo importante es aprovecharlo al máximo.
Trabajada Por: Juana Mercedes
Fuente:https://mejorconsalud.as.com
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