El exgobernador de California, conocido por su papel icónico como Terminator, ha enfrentado problemas cardíacos recurrentes a lo largo de su vida.
La semana pasada, Schwarzenegger se sometió a tres cirugías “a corazón abierto” y a la implantación de un marcapasos, procedimientos críticos para el mantenimiento de su salud. A pesar de la seriedad de la situación, el actor mantuvo su característico sentido del humor: “Ahora sí que soy un poco Terminator,” bromeó.
Schwarzenegger agradeció a los profesionales médicos que lo atendieron, destacando la innovación médica que hizo posible que las cirugías fueran “lo menos dolorosas posible”. Reconoció que su vida ha estado en peligro, pero se mostró agradecido por la atención recibida y por seguir con vida gracias a la intervención oportuna de su equipo médico.
“Todos los médicos y enfermeras me cuidaron de maravilla e hicieron que la cirugía fuera lo menos dolorosa posible. Si todavía estoy aquí es gracias a la innovación médica y por haber escuchado a mis doctores. Las válvulas bicúspides mataron a mi madre”, confesó el artista luego de la instalación de su marcapasos.
Este incidente pone de relieve la importancia de la atención médica especializada y la innovación en procedimientos cardíacos, así como la resiliencia y el optimismo frente a desafíos de salud significativos.
El actor ha recibido el respaldo de sus familiares, amigos y seguidores, todos preocupados por su salud y lo que ha tenido que vivir para alargar sus años en la tierra. Sobre todo, sus fanáticos han destacado la labor motivacional que el actor ha hecho en los últimos tiempos, dedicado a mostrar cómo fue su camino y cómo llegó a las metas que se propuso.
No es la primera vez que el actor de Hollywood y político tiene problemas de corazón, ya que en 2020 le tuvieron que reemplazar la válvula aórtica junto con una nueva válvula pulmonar que había recibido en 2018. Además, en 1997 se sometió a una cirugía cardíaca electiva para reemplazar una válvula cardíaca aórtica congénita defectuosa.
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