La de 13 años cursa el primero de bachillerato, y la de 17 años, el cuarto de bachillerato. También figura una prima de ellas que se lo confesó a su madre, quien desde Estados Unidos llamó a la madre de dichas menores, y todas unieron sus voces de denuncia.
Esa llamada ocurrió el pasado 3 de junio y, al día siguiente, la madre de las dos menores (de 13 y 17 años) acudió a poner la denuncia en la Fiscalía de Santo Domingo Oeste.
Las dos hermanitas fueron entrevistadas por una psicóloga forense, a quien le contaon las cosas que les hacía el pastor, y fueron sometidas a exámenes médicos.
Ambas dijeron que el pastor Castillo Ortega se aprovechó de ellas, agarrándoles sus partes íntimas en el sótano de la iglesia, y que incluso a una de ellas trató de penetrarla. Según su testimonio, el pastor las manoseaba, les metía la mano por el zíper y las toqueteaba. Estos abusos habrían durado años y años.
El viernes pasado, el pastor fue liberado a cambio del pago de una fianza de 50 mil pesos, impedimento de salida del país y presentación periódica durante seis meses, debiendo presentarse el día 14 de cada mes. Además, se le ordenó mantenerse alejado de las menores y se le advirtió que, en caso de que fuera a lugares frecuentados por las víctimas, de inmediato sería reducido a prisión.
La decisión fue tomada por la jueza Cecilia Toribio Melo, de Atención Permanente de Santo Domingo Oeste. La magistrada también fijó para el 14 de agosto la entrevista en cámara Gesell de las presuntas víctimas.
Unos días después, surgieron otras denuncias contra el mismo pastor, razón por la que fue apresado otra vez a la espera de que le conozcan mañana medidas de coerció
Social Buttons