Aunque no lo creas, beber agua embotellada puede traer consigo muchos problemas a largo plazo. A diferencia del agua proveniente de los purificadores de agua, los cuales sabemos de antemano que cumplen su función a la perfección debido al uso de la tecnología Firewall en su filtración, el agua embotellada que ofrecen diferentes empresas no siempre es buena para nosotros.
Aquí en Aqualogic nos preocupamos por tu salud. Por eso, hablaremos sobre 5 peligros de beber agua embotellada para tu salud.
1. Puede contener partículas de plástico
El riesgo principal asociado al consumo de agua embotellada es el hecho de que, al estar en contacto con el plástico, puede estar expuesto a toxinas nocivas procedentes del mismo.
Si bien el agua no es ácida, siempre que se bebe de una botella de plástico, se corre el riesgo de ingerir los residuos de los productos químicos con los que fueron hechas, ya que estos elementos pueden filtrarse en el agua y contaminarla con el pasar del tiempo.
Ya que son producidas en masa, las botellas de agua más antiguas o expuestas al sol suelen tener mayor cantidad de toxinas como el BPA (producto químico utilizado para la fabricación de plásticos) que pueden llegar al torrente sanguíneo.
Esta exposición a sustancias nocivas para el humano puede generar una serie de problemas, como varios tipos de cáncer y daños al hígado y los riñones.
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2. No podemos fiarnos de la etiqueta
Seamos honestos, ignoramos los daños ambientales que supone la superproducción de agua embotellada y somos parte de ella solo porque muchas empresas dicen vender agua pura y de calidad. Pero no deberíamos fiarnos ya que muchas veces es todo lo contrario.
Muchos anuncios de agua embotellada muestran manantiales frescos y cristalinos, y dicen que su agua viene de ellos. Lamentablemente, son muy pocas las empresas que realmente venden este tipo de agua. La mayoría se abastece del agua proveniente del suministro municipal. Es decir, su agua no tiene nada especial más que el nombre.
3. Incluso el agua de manantial debe ser filtrada
Se dice que un 55% de las fuentes de agua embotellada procede de manantiales. Esta agua es bombeada desde el subsuelo hasta fluir de forma natural en la superficie. Sin embargo, es difícil saber en qué condiciones se encuentran estos lugares y si en realidad son aptas para el consumo humano.
Esta es otra cosa que debes tomar en cuenta, ya que el agua de manantial muchas veces no está regulada y necesita ser filtrada, por lo que existe la posibilidad de que algunas de las empresas que utilizan estas fuentes como parte de su publicidad no estén siendo del todo honestas.
Algunas veces, la información que nos venden las marcas puede ser parte de una estrategia de marketing. Pongamos como ejemplo el caso del agua Poland Spring, una marca que se enfrentó a múltiples demandas por publicidad falsa. Se descubrió que el manantial del que extraían el agua en realidad se había secado hace más de 50 años.
Muchos pueden vender la idea de que el agua de manantial es una de las más puras, pero debemos ser conscientes de la situación actual. Beber agua extraída directamente de un manantial sin haber sido filtrada no es seguro. Es necesario que pase por distintas fases de purificación para convertirse en agua potable que además sea beneficiosa para la salud.
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4. Está correlacionada con mayores problemas de salud en lo adultos
La exposición a las toxinas de las botellas de agua plastificadas también se ha relacionado con mayores índices de enfermedad en los adultos.
Estudios demuestran que las personas que beben mucha agua embotellada tienen altas concentraciones de BPA en el cuerpo, lo cual supone el triple de probabilidades de sufrir enfermedades cardiovasculares, y son dos veces más propensas a desarrollar diabetes tipo 2.
Incluso el BHPF, otro elemento que se usa en la producción de plásticos, es tan peligroso como el BPA. Por lo que, sin importar lo mucho que la industria del plástico quiera innovar sus botellas para hacerlas más seguras, es evidente que lo mejor es simplemente disminuir o cesar su consumo.
5. Reutilizarlas puede ser el doble de malo
Sabemos que muchas personas han comenzado a reutilizar las botellas de plástico desechables con el fin de reducir la contaminación. Esta idea puede parecer buena para cuidar el ambiente, pero no para tu cuerpo.
Las botellas de plástico desechables llevan ese nombre por una razón: deben ser desechadas. Al reutilizar estas botellas, se corre el riesgo de que las toxinas y microplásticos de ellas se mezclen con el agua potable.
Además, estas botellas son muy difíciles de limpiar, y el plástico del que están hechas son como el material perfecto para la acumulación de bacterias. Así que reutilizarlas no debería ser una opción.
En conclusión, el consumo de agua embotellada debe ser regulado, y eso depende de nosotros. Ten en cuenta los peligros que mencionamos en este artículo y verás que consumiendo agua más pura evitarás muchas enfermedades y notarás cambios positivos en tu organismo.
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Fuente:https://aqualogic-water.com
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