Con pancartas y consignas como “si no soy dominicano, Abinader tampoco”, los manifestantes defendieron su identidad como dominicanos, en oposición a lo que consideran un trato discriminatorio.
Los manifestantes se mostraron molestos y desilusionados, exigiendo “no ser maltratados” y reclamando su derecho a ser reconocidos como parte de la nación dominicana.
La protesta tuvo lugar en el marco del aniversario de la sentencia emitida el 23 de septiembre de 2013, por el Tribunal Constitucional, la cual estableció los límites para acceder a la nacionalidad dominicana, negando ese derecho a quienes provengan de familias en situación migratoria irregular.
Los miembros del Movimiento Reconocido reiteraron su llamado a las autoridades para que se les respete como ciudadanos dominicanos, resaltando la necesidad de cambios en la aplicación de la mencionada sentencia.
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