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Las bocinas fueron entregadas al Ministerio Público durante un acto en la explanada del Palacio de la Policía Nacional.
En el acto, la funcionaria destacó que la Operación Garantía de Paz incluye la regulación del expendio de bebidas alcohólicas y la supervisión de establecimientos que puedan alterar la paz comunitaria, especialmente por contaminación sónica.
La Ley 90-19 condena la contaminación sónica y regula los decibelios permitidos «para que el ruido no afecte a los vecinos ni a la comunidad», recordó.
Asimismo, hizo un llamado a los negocios de expendio de bebidas alcohólicas para que operen con conciencia y responsabilidad, respetando el derecho al descanso y la tranquilidad de los ciudadanos.
«Nadie tiene que alterar la paz de una comunidad. Estas 206 bocinas representan nuestro compromiso de garantizar que la seguridad ciudadana y la paz no sean vulneradas», precisó.
Los propietarios podrán solicitar su devolución bajo los parámetros legales correspondientes, aclaró Raful. EFE
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