“Ustedes han visto la cantidad de migrantes que llegan a pie a la frontera sur de Estados Unidos, que son miles y miles, que antes no se veía, es decir, que es un flujo inusual y por tanto, vamos a tener un flujo inusual de repatriaciones”, declaró Guzmán.
Según la ex diplomática, antes de la llegada de Donald Trump a la presidencia, el territorio dominicano recibía hasta tres vuelos semanales con ciudadanos deportados. Sonia también aclaró que el proceso migratorio está dirigido a indocumentados y personas que ingresaron irregularmente a EE.UU. a través de México.
Por su parte el Defensor del Pueblo, Pablo Ulloa, reconoció que las deportaciones no se detendrán y sugirió que el Gobierno dominicano implemente un plan de reinserción laboral para quienes regresan al país. “Lo que nosotros tenemos que hacer como Estado es garantizarle a aquel dominicano que llegue que pueda reintegrarse a la sociedad y crearle las oportunidades”, expresó Ulloa.
Guzmán reiteró que los dominicanos con estatus migratorio regular en EE.UU. no deben preocuparse, ya que las medidas están dirigidas exclusivamente a quienes no cuentan con documentos legales.
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